En los siguientes próximos dos años es probable la crisis de empleo y sustento, estancamiento económico, daño ambiental provocado por el hombre, erosión de la cohesión social, desilusión generalizada en jóvenes por la falta de trabajos, desigualdad en el acceso a servicios digitales, y ataques terroristas, informó el Foro Económico Mundial.
“El costo humano y económico inmediato de COVID-19 es severo. Amenaza con poder retrasar años de progreso en la reducción por la pobreza y la desigualdad y con debilitar aún más la cohesión social y la cooperación mundial”, estimó en su Reporte de Riesgos Globales. Recalcó que el Covid-19 no sólo ha causado más de dos millones de muertes, también sus efectos en el sector económico y de salud a largo plazo “seguirán teniendo consecuencias catastróficas”.
La ola económica de la pandemia aumentará la desigualdad, pero también lo hará una recuperación desigual. un ejemplo de ello, sólo en el segundo trimestre de 2020 se perdieron horas de trabajo equivalentes a 495 millones de empleos, refirió el Foro. En su reporte de riesgo agregó también que en un plazo de tres a cinco años son probables las burbujas de activos, la inestabilidad de los precios, las crisis de las materias primas y las crisis de la deuda; en hasta 10 años se podría notar el desbordamiento de Estados o instituciones multilaterales.
¿Crisis de empleo o era de hielo del empleo?
Señaló que esto se suma a una “era de hielo del empleo”, reflejado más para los adultos jóvenes que están experimentando su segunda gran crisis mundial en una década.
Sobre el tema del cambio climático destacó que si bien se redujeron las emisiones globales en la primera mitad de 2020, no quiere decir que no repuntarán en la fase de recuperación y informó que el “fracaso de la acción climática es el riesgo a largo plazo más impactante y el segundo más probable identificado reporte de riesgos globales.
Fuente: LA JORNADA
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